Con la colaboración de ATE, se lanzó la revista Añamembui en Paraná, en español de Argentina.
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Aerolíneas Argentinas anunció este jueves la suspensión preventiva de las operaciones de ocho aeronaves Boeing 737-800 que utilizan motores fabricados por CFM, a raíz de la falla ocurrida en el vuelo AR1526, que despegó ayer desde Aeroparque con destino a Córdoba. “La medida se centra en los propulsores y no en otros elementos de las aeronaves”, comunicaron.
“Los motores involucrados son de la compañía CFM (GE Aerospace y Safran Aircraft Engines) y tienen un componente específico que ha causado estas fallas”, señaló la empresa en un comunicado. La decisión se tomó durante el plenario del Comité de Seguridad de la compañía, integrado por sus máximas autoridades.
Como se informó, el vuelo AR1526 experimentó una falla técnica en uno de sus motores poco después del despegue. La tripulación siguió los procedimientos de seguridad y dirigió la aeronave al Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde aterrizó sin problemas. “Los pasajeros desembarcaron con total normalidad”, indicó la aerolínea.
Aerolíneas destacó que sus tripulaciones “realizan capacitaciones recurrentes para manejar este tipo de situaciones” y que el incidente “forma parte de los escenarios que tanto pilotos como tripulantes de cabina conocen y ensayan en profundidad”. Además, resaltaron que todos los procedimientos se llevaron a cabo “de acuerdo con los estándares internacionales de seguridad”.
La compañía informó que el mantenimiento de todos sus motores “se realiza cumpliendo estrictamente con las verificaciones indicadas por los fabricantes”. No obstante, admitió que “este es el cuarto incidente registrado en el último año con respecto a este tipo de motor”.
La empresa explicó que CFM recomienda realizar una revisión al llegar a los 17.200 ciclos —entre aterrizajes y despegues—, aunque “ninguno de los motores que fallaron estaba cerca de alcanzar ese umbral”. Por lo tanto, Aerolíneas solicitó al fabricante “una evaluación técnica antes de reincorporar estos equipos al servicio”.
Asimismo, pidió la evaluación de otras aerolíneas de la región que operan con la misma motorización y que “han tenido incidentes similares”. También notificó a las autoridades regulatorias locales, colaborando “para establecer un criterio de resolución”.
“Esta suspensión preventiva obedece a criterios de altísima exigencia”, subrayó la empresa. “La medida se enfoca en los propulsores y no en otros elementos de la aeronave”, aclaró el comunicado oficial.
El incidente del miércoles afectó a más de 160 pasajeros del vuelo AR1526 de Aerolíneas Argentinas, que había salido del Aeroparque Jorge Newbery, en CABA, con destino a Córdoba. Un motor del avión sufrió una falla y se desvió hacia el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, en Ezeiza, donde aterrizó sin contratiempos.
Como consecuencia del hecho, la terminal aérea metropolitana estuvo cerrada por algunas horas, reabriendo sus puertas alrededor de las 11:30 y reanudando sus actividades habituales. Sin embargo, algunos vuelos programados para esa jornada sufrieron demoras y reprogramaciones menores.
Fuentes de la aerolínea señalaron que “el motor se encontraba en condiciones normales y había sido correctamente mantenido”. Después de una inspección en la pista, el fabricante fue informado sobre el incidente para determinar el origen de la falla.
El Boeing 737-800 fue liberado tras completar las tareas de revisión y limpieza en la pista. La empresa aclaró que la medida preventiva no implica la cancelación de rutas, pero sí “una reorganización temporal de la programación de vuelos mientras se realicen las verificaciones técnicas”.
Aerolíneas continuará en contacto con el equipo técnico de CFM y con las autoridades aeronáuticas locales e internacionales “para definir los próximos pasos antes de reincorporar las aeronaves al servicio”.